Reseña de Big Fish de Daniel Wallace

La película Big Fish de Tim Burton me gustó mucho y por eso llevo tiempo queriendo leer el libro en el que se basa. Ahora que lo he leído, quiero volver a verla porque no sé si me acuerdo mal o es que el final es totalmente distinto del que tiene el libro. En fin, si te interesa saber qué me ha parecido esta novela, sigue leyendo. 

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El padre de William Bloom, Edward Bloom, es un hombre de éxito: tiene dinero, una casa grande, es un emprendedor y a todo el mundo le cae bien. Pero se está muriendo. A través de flashbacks, la novela cuenta algunos episodios de la vida de Edward tal como él se los contaba a su hijo, lleno de elementos fantásticos e increíbles.

Lo que más me ha gustado de Big Fish son las escenas del pasado de la vida de Edward Bloom, relatos entre la fantasía y el realismo mágico que me han parecido muy inventivos en general. Me ha encantado que incluso se puedan leer como relatos cortos y son muy evocadores pero a la vez tienen componentes muy realistas y viscerales. Mete las brujas, los gigantes, las ninfas... en la vida diaria, creando una fabulación de la vida de Edward. 

Las escenas más mundanas, sobre todo a partir del nacimiento de William no me han gustado tanto, echaba de menos el componente fantástico de los episodios anteriores. También es un libro que tiene retrata el momento de la muerte y la enfermedad terminal de una forma muy cruda y realista, lo cual es interesante pero duro de leer. A pesar de no ser tan dinámicas, estas escenas permiten al lector profundizar en la psique de los personajes y entenderles mejor, haciendo que nos importen más.

Algunos de los mensajes que transmite el libro, sin embargo, me han parecido un poco rancios. Aunque el escritor es joven, hay algunas alusiones a que la mujer es la que se encarga de cambiar los pañales a los hijos y el hombre de enseñarles las lecciones vitales. También en cuanto a las personas con defectos físicos o mutilaciones. Aunque no esté de acuerdo con estos mensajes, no es algo escandaloso que me haya impedido disfrutar la lectura. 

Tuve una experiencia extraña leyendo Big Fish y es que me pareció que había muchas metáforas y lenguaje cristianos, que no es un punto ni negativo ni positivo, solo una curiosidad. A parte de las conversaciones de Dios y Jesucristo, y sin entrar en spoilers, hay un episodio que me ha parecido una versión de David y Goliat y el pez del título, que es el acrónimo griego del nombre de Jesús, un símbolo muy típico para representar al hijo de Dios. Pero busqué en Internet y por lo visto el autor es agnóstico y más bien contrario a la idea de una religión organizada, así que ha debido ser casualidad. Me ha sorprendido porque yo estaba convencida de que el mensaje cristiano estaba muy presente a lo largo de toda la historia.

En definitiva, Big Fish no me ha parecido un libro perfecto, pero sin duda es una lectura rápida, interesante y bien escrita. 

Si te gustó, te gustará...

• Los descendientes de Kaui Hart Hemmings: Aunque esta novela ambientada en Hawaii no tenga elementos fantásticos, tiene un tono muy similar, en el que se mezcla la crudeza de las escenas de hospital con un personaje en coma y episodios divertidos con un sentido del humor propio y personajes muy fuertes. Puedes encontrarlo en Amazon aquí.
• Matar a un ruiseñor de Harper Lee: Aunque no sean muy parecidos, ambos libros me parece que dejan un regusto similar. Los dos están ambientados en zonas rurales de Estados Unidos y ambos protagonistas viven con un padre que parece lleno de virtudes. Además, a los niños de esta novela, aunque no les ocurran cosas fantásticas, sí que tiene un cierto toque de irrealidad. Puedes encontrarlo en Amazon aquí. 

Mi valoración: 4/5

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